Si ustedes preguntan, cuando llega el momento de ver a una creatura (aun no es criatura pues no la he criado), tan pequeñita, que cuando lo desnudas para cambiarlo parece ratita y pone cara de susto y que es tan chiquito que con una mano lo cargas, llegas a reflexiones profundas.
La primera es que todo lo que pasas en la vida (momentos amargos, alegrías, tropiezos, exitos), todo adquiere sentido cuando lo ves. La otra es que si, medio mundo lo quiere conocer, pero una realidad es que a un chingo de gente esta belleza les vale madres, y si Eri (su mama) o yo no lo cuidamos y no velamos por el, nadie lo hará. Es muy fuerte.
Hay muchas reflexiones pero estoy en el trabajo y solo quería presentarlo. Su nombre es Leonardo Domínguez Espitia, a.k.a. Leo.
Sin ser papa gallina, y sin orgullo de nuevo padre: A poco no esta super bonito. Se me hace que me voy a dedicar a hacer niños y venderlos. Saludos
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